En la playa
Un día tranquilo de playa que se convierte en algo inesperado
Era martes cuando mi novia y yo fuimos a la playa. Íbamos pertrechados con todo lo necesario para pasar todo el día, incluyendo sangría bien fría para hacer más agradable el día de calor que hacía.
Al llegar a la playa vimos que estaba muy vacía, cosa que nos animó ya que no nos gustan las playas atestadas de gente. Buscamos un sitio que nos gustase y plantamos la sombrilla y la toalla, yendo enseguida a darnos un baño de bienvenida. Al salir del agua vimos que una pareja de unos 45 años se había colo...