Con las manos en la masa.

Por fin mi esposa cumple una de mis fantasías, verlas acostarse con otra mujer y es pillada sin saber que la observo a ella y su amiga.

Jamás olvidaré ese preciso instante en el que por fin mis sueños se hicieron realidad. Aún me excito solo de recordarlo y mi corazón se pone a mil como si me hubiera pinchado adrenalina en vena.

Todo comenzó como cualquier otra experiencia en pareja, con un poco de suerte, el destino quizás, y un poco de preparación a que aquel maravilloso acontecimiento se diera.

Mi paraje y yo siempre hemos sido una pareja muy juguetona, nos encanta decirnos cosas al oído mientras practicamos sexo, incluso hem...

Todo incluido.

Una pareja decide pasar sus vacaciones de una forma diferente, pero la magia del lugar y la compañía hace que el juego y la pasión afloren.

El verano pasó y otro año más no coincidimos mi pareja y yo para hacer coincidir nuestras vacaciones juntos. No obstante queríamos recuperar esos días, y disfrutar un poco.

Programamos nuestras vacaciones para al menos coincidir dos semanas en el mes de octubre, esperando que el tiempo nos acompañara y así poder organizar unos días de placer y distracción.

Decidimos alquilar una casita rural cerca de la playa, pero que tuviera un patio, jardín o zona donde poder organizar alguna fiesta, con el o...

Venganza

Como los juegos eróticos pueden llegar a irse de las manos, y la venganza se sirve en bandeja.

Toda pareja sufre durante su relación diferentes etapas que sirven para afianzar más la confianza y mejorar la relación o en otros casos acaban con la misma.

Mi esposa es una chica discreta, y bastante respetuosa, pero eso no le hace ser menos humana. Es una chica bastante dotada y muy buena amante, de piel morena, cabello castaño y unos ojos preciosos.

Al principio de la relación, solíamos sacarnos muchas fotos eróticas, para luego verlas y acabar haciendo el amor como conejos. La verdad es que...

Mientras dormían.

El suplicio de cualquier pareja, en sus comienzos es encontrar el sitio adecuado para intimar. Tanto que en ocasiones, te pasan por la mente, millones de lugares y situaciones en las que dar rienda suelta a tu imaginación y pasar de la fantasía a la realidad.

El suplicio de cualquier pareja, en sus comienzos es encontrar el sitio adecuado para intimar. Tanto que en ocasiones, te pasan por la mente, millones de lugares y situaciones en las que dar rienda suelta a tu imaginación y pasar de la fantasía a la realidad.

Teníamos, 19 ella y yo 20 recién cumplidos. Solíamos quedar los fines de semana para ir al cine, pasear, comer por fuera, y porqué no para jugar donde podíamos, luego estaríamos una semana o quizás dos, sin poder vernos por razones de estudio y t...

Nyotaimori

Las curiosidades de una pareja van más allá de lo previsto, y descubren como una costumbre japonesa que desconocían, se convierte en una perversión que alimenta su sexualidad.

  • Cariño, ¿sabías que han abierto una restaurante nuevo aquí cerca?
  • No, ¿Dónde?
  • Pues la verdad es que no sé exactamente el lugar, he encontrado por casualidad en un foro de un señor de la península que en breve abrirían un restaurante de comida japonesa aquí en la isla, y me ha sorprendido que nombraran nuestro pueblo. Buscaré mejor a ver si me entero del lugar de ubicación.

Lo cierto es que por los comentarios que se hacían desde el foro, todo me sonaba a chino, evidentemente es una expresión que...

Nyotaimori/Nantaimori. Parte II.

La perversión va más allá de lo esperado y las curiosidades van aflorando nuevos deseos que satisfagan sus necesidades sexuales.

Tras aquella maravillosa noche, tuvimos varios encuentros durante la semana previa a la reserva del restaurante japonés. No es que fuera una obsesión, pero nos había dado cuerda para jugar durante unos días.

Ana estaba bastante impaciente en que llegara aquel día, y algo me decía que mis sospechas de que había reservado a Javier como plato, eran ya bastante evidentes.

Llegó la noche esperada, y esta vez, Ana optó por ponerse un traje aún más escotado que el que había llevado la vez anterior....

Regalo sorpresa

Las fantasías se pueden hacer realidad, siempre que exista confianza con la pareja. Si conoces a tu pareja, y logras descubrir sus vicios, puedes abrir una puerta a un placer que desconocías.

¡Qué sol hace!, otro año más tendríamos una primavera-verano sofocante. Sólo apetece tomar unas cañitas, comer algo suave y llevar el mínimo de ropa posible. Encima la piscina está otra vez estropeada.

Abro la nevera y está casi vacía.

  • ¡Diana hay que ir a comprar, no queda nada!, comenté en voz alta a mi mujer que estaba en la terraza cogiendo sol.
  • ¿Vamos esta tarde?, contestó ella.
  • Vale, comemos algo y salimos, dije cerrando la nevera de golpe.

Mi mujer se llama Diana, tiene 33 años...

¿Quién la lleva? Parte III

Los prejuicios y malos entendidos pueden llevar a que muchas fantasías no se cumplan, pero como hablando se entiende la gente, si la pareja se deja llevar puede disfrutar al máximo. Por fin nuestros amigos se dejan llevar algo más, sin prisas pero sin pausa.

Después de aquella apasionante noche de cena con sorpresa, la mente empezó a maquinar nuevas fantasías y deseos en ambas parejas. Jamás nos hubiéramos planteado ciertos temas y menos ciertas prácticas sexuales ajenas a la pareja. Quizás todo se estaba saliendo de madres, quizás tendríamos que echar el freno y no ir tan rápido. Nuestro propósito no era el de jugar con fuego y acabar quemándonos, ¿y si todo aquello acabaría mal por ir más allá de nuestros límites como pareja? ¿Y si por jugar con fuego quebrar...

¿Quien la lleva? Parte II

Como las chicas se vengan de nosotros por jugar con ellas.

Presos nuevamente de la vida cotidiana, los días fueron pasando. Laura y yo, manteníamos las conversaciones que se prolongaban algunas veces hasta altas horas de la madrugada.

Mi mujer y yo solíamos en determinadas épocas primaverales o veraniegas, jugar sacándonos fotos en los lugares a los que solíamos ir de paseo o aventura. Pero últimamente, esas fotos tenían un grado mayor de picardía y erotismo. Antes no solía dejarse hacer fotos muy escandalosas o provocativas, pero de repente algo había camb...

¿Quien da más?. Parte (I)

Como algo tan simple e inofensivo puede llegar a resultar una herramienta para despertar el morbo y el juego en una pareja.

Ya eran las diez y media de la noche, y mi mujer seguía sin llegar. Otra vez llegaríamos justitos al último pase del cine; otra vez perderíamos una de las pocas opciones de ver la película.

Son las circunstancias de vivir para el trabajo y compaginarlo con los hijos, que nunca tiene uno tiempo para sí mismo. No penséis que soy mal padre pero toda pareja debe tener su momento de relax y diversión.

Por fin llega mi mujer, y para mi sorpresa viene cambiada del trabajo. Uno retoques en su precio...