Degradación y desefreno
Es sobre la calentura que me invadió durante un periodo de mi vida, después de abrirme al sexo desenfrenado instigada por mi amiga Mercedes
Sumisión, degradación y desefreno.
Casi siempre veía al negro los sábados, después de trabajar mediodía ya sabía que nos citabamos en casa de Mercedes donde pasaba por mí y me llevaba a algún motel donde teníamos la mayor parte del tiempo breves encuentros porque a él sólo le gustaba penetrarme por detrás además del sexo oral que le gustaba que yo le hiciera, a mi me seguía excitando mucho el trato que me daba, la vulgaridad con que se dirigía a mi, no entiendo bien porque yo que de hecho nunca...