La rutina de Juan

La rutina de Juan.

Café de por medio conversaban Juan y José de autos, futbol y mujeres. El amor no existe, dijo Juan, lo único que vale es el deseo, que te deseen es lo mejor.

Es verdad dijo José.

Por supuesto agregó Juan. Yo sueño con que mi mujer sea una verdadera puta que arda de deseo. Y que se comporte como tal: quisiera que se vista como una puta, que hable como una puta, que se caliente como una puta, que me desee como una verdadera puta. Eso es mucho más valioso que el amor.

Tienes razón afirmó...

Por una vez fui más deseado que mi hermosa mujer

La inusitada experiencia de un matrimonio swinger.

Hacía unos cuantos meses que mi esposa y yo habíamos decidido mantener encuentros sexuales al estilo swinger. Lo hacíamos unas dos veces por mes y durante ese período conocimos muchas parejas y hombres solos muy interesantes.

No fue nada sencillo ponernos de acuerdo ya que mientras yo deseaba casi con desesperación verla en brazos de otros hombres, mujeres o parejas, ella siempre sostuvo que no necesitaba nada de eso y que solo lo hacía por complacerme. La negociación nos llevó un buen tiempo lu...

Dominación no deseada

Un hombre es dominado por su mujer sin poder determinar si esto es causa de pesar o placer.

Lo que sucedió entre Ramiro y Máxima fue un proceso natural, cayó por su propio peso.

Nunca lo conversaron y menos aún lo planificaron. No obedeció a fantasías que alguno de ellos hubiera tenido alguna vez y nunca sospecharon, ni por separado ni en pareja, que les llegara a ocurrir. Pero ocurrió y así viven desde hace muchos años.

Máxima era una joven tan hermosa como desprejuiciada. Muy liberal se vestía de forma muy llamativa exponiendo sus grandes pechos a la mirada lasciva de profesore...

Mi cruel realidad

La excitante vida de una mujer que aprendió el sexo admirando a sus padres.

Mi primera regla no vino sola. Además de los miedos, dolores y molestias me trajo una insaciable curiosidad sobre el sexo. También me llenó de ansiedad, pasión y calenturas tan violentas que me resultaron imposibles de dominar a mis escasos trece años. En realidad no comprendía lo que me sucedía pero lejos de asustarme o rechazarlas, al darme tanto placer, decidí disfrutar.

Para esa época habitábamos con papá, mamá y mi hermano apenas mayor una precaria casilla de madera ubicada sobre un terreno...

Me arrodillé y no sabía

Me arrodillé para relajarme pero mi compañera interpretó otra cosa.

Una calurosa noche de enero me encontraba acostado intentando dormir junto a Mariela, mi compañera en la vida desde hacía poco menos de un mes, pero no lo lograba. Una persistente molestia no me permitía relajar. No se trataba de un dolor sino de una inquietud, estaba intranquilo por diferentes problemas laborales y económicos, de esos que te impiden apoyar la cabeza en la almohada y descansar.

El cuarto estaba oscuro, serían las dos de la mañana, Mariela dormía o eso creía yo y solo se escuchab...

Luna de miel (2: versión por la esposa)

Comenzaré diciendo que hoy soy la mujer de un hombre que ha sabido encontrar y sacar de mi interior a la verdadera hembra sedienta de placer que hay en mí.

Comenzaré diciendo que hoy soy la mujer de un hombre que ha sabido encontrar y sacar de mi interior a la verdadera hembra sedienta de placer que hay en mí. Siempre supe que existía, no es este el momento de hacerme la ingenua, pero estoy segura que sin su provocación y empuje nunca me hubiese abierto como ya verán que hice, seguramente me habría reprimido como hace la mayoría.

Desde el comienzo de nuestra relación ha explorado incansablemente mi interior en una búsqueda minuciosa de sensaciones...

Luna de miel

Si hay algo que me gusta en esta vida son las mujeres, pero una en especial me vuelve loco: mi esposa.

Si hay algo que me gusta en esta vida son las mujeres, pero una en especial me vuelve loco: mi esposa. Ella es muy hermosa, no-solo ante mis ojos, sino ante la mirada generalizada de hombres y mujeres.

Así como a mí me gusta observarla, ella disfruta al exhibirse. No sabría decir cual de los dos se excita más ante la misma situación. Y lo fuimos descubriendo desde la época escolar, cuando éramos compañeros de clase.

Por esos días ella llegaba cada mañana a la escuela vestida impecablemente...