Los vecinos (2)
y apareció aquel gordito precioso dispuesto a sacarnos toda la leche a Ricardo y a mi.
Estábamos los cuatro desnudos al sol secándonos después de la ducha a la vez que nos besábamos, cuando oímos aquella voz detrás de nosotros, nos quedamos un poco sorprendidos mi mujer y yo sobre todo cuando vimos que era un chaval de unos 20 años bajito, gordito y con una polla igual de gorda que la de Ricardo tiesa como un palo.
Hola Raúl, que haces ahí? Tranquilos es nuestro hijo.- dijo Ricardo
Os he oído y no he podido reprimirme jejejeje.- dijo el niño
Mi mujer y yo nos quedamo...