Historia de una infidelidad
Una mujer, casada con un hombre mucho mayor que ella, no sabe aún lo que es una relación sexual plena, hasta que en un viaje se entrega al conductor del autocar que la hace sentirse plenamente mujer en la cama.
No sé cómo empezar a relatar la historia de cómo una vida de una mujer decente y corriente pasó a otra cosa bien distinta. Mi nombre es Ana, tengo 39 años y me casé a los 20 con Juan un hombre 20 años mayor que yo. En principio deslumbrada, por alguien con una buena posición social y económica muy distinta a los jóvenes de mi edad. No se si le podría llamar amor pero me cautivó. Ignoraba la realidad de este señor maduro que me llevó al altar. La verdad la supe cuando fue tarde. Se casó para acallar las habl...