Marta, mi puta esclava
Historia real y sádica, en donde obligue a una chica de 18 años a aflorar su verdadera personalidad. Me sucedió en julio del 2002.
Más que una confesión, es una declaración de cómo pude dominar a una magnífica, exuberante y malcriada chiquilla. Sé que quizá suene a fantasía, pero lo cierto es que me jacto de haber vivido (Julio del 2002), esa singular experiencia.
Todo comenzó una tarde de domingo, me encontraba en el estacionamiento de una plaza comercial. Había ido al centro de revelado de fotos y para matar la hora de espera, en que estarían las fotos, me fui al estacionamiento en donde había dejado el carro, a matar el...