El Agradecimiento de mi prima (II y final)
La aventura de estos primitos continúa y esta vez en un motel con jacuzzi donde disfrutarán a sus anchas de su recién iniciada relación.
Al llegar al auto, ya más tranquilos los dos, hablamos de lo pegajosa que iba a quedar la mesa después de semejante festín que nos dimos, al avanzar y toparnos con el primer semáforo puse mi mano sobre la palanca de velocidades, ella colocó la suya encima y acarició mis dedos, lo que fue un detalle muy tierno de su parte, obviamente correspondí a su caricia e hice lo mismo, me miró y dijo:
-No puedo creer lo que estamos haciendo, es tan... tan rápido y a la vez tan lindo.
En un momento pensé con...