Los chicos que miraban de vacaciones a mi esposa
De vacaciones en México, la pareja no podía ni imaginar sobre lo que se ocultaba en el grupo de jóvenes que no les quitaban ojo de encima.
Siempre había pensado que ir a un resort vacacional en México debía ser aburrido, con bucles monótonos de playa, comida, piscina y alcohol. Tras el segundo día en el complejo hotelero con mi marido, mi percepción cambió rápidamente.
Luis me había terminado por convencer para, aprovechando una oferta, tomarnos una semana de relajación absoluta. Tal y como le conocía estaba convencida de que se habría hecho muchas ilusiones para que nuestro viaje fuera sexualmente activo. Tras un primer día agotado por...