Carol

Recuerdo la primera vez que te vi entrar en mi consulta, Carol. Tenías 19 años, la enfermera pronunció tu nombre por el micrófono, entraste unos segundos después. Estabas la última de la lista que la fría burocracia de la clínica me había asignado para ese día. Estaba cansada. Apenas me fijé en el momento en el que irrumpiste en mi vida.

Carol.

Recuerdo la primera vez que te vi entrar en mi consulta, Carol. Tenías 19 años, la enfermera pronunció tu nombre por el micrófono, entraste unos segundos después. Estabas la última de la lista que la fría burocracia de la clínica me había asignado para ese día. Estaba cansada. Apenas me fijé en el momento en el que irrumpiste en mi vida.

Me empezaste a exponer tu problema, y reaccioné. Tu voz era tímida, tú eras tímida, y salía de una cara fresca, levemente ruborizada, con pelo...