Pintando a mi hija 2
Cuando podía haber arreglado las cosas voy yo y las lío mucho más...
Que semanas tan duras! Sin duda las más duras de mi vida, incluso peores que las posteriores a la muerte de mi esposa. No sabía que pensaba mi hija, que sentía, no habíamos hablado desde la tarde que la desnudé y con el pretexto de pintar sobre ella, sobé su cuerpo hasta correrme en sus nalgas como un toro. Nos habíamos cruzado por la casa en varias ocasiones, pero éramos dos extraños, cuando yo habría la boca para hablarle ella miraba al suelo y seguía su camino. Esperaba algún tipo de reacción por su part...