Los vecinos

Como decido dar un buen espectáculo a nuestros vecinos de enfrente

A veces les veía en su terraza regando las plantas o tomando el sol en unas hamacas que tenían mientras acababan botellines de cerveza, era al comienzo de la primavera, eran dos hombres de unos treinta y pocos uno y el otro ya de cuarenta y tanto años los que habitaban el piso de enfrente desde hacia unos meses;

ambos edificios eran simétricos el uno del otro, dormitorio con dormitorio, cocina con cocina salón con salón terraza con terraza. S

u piso quedaba a no más quince metros del nuestro aunque no...

Doguin

Nuestro primer doging llegó sin saberlo. Tuvo que venir Internet para saber que lo que hicimos en lugares apartados en el coche aquel verano se llamaba “doging”.

Tuvo que venir Internet para saber que lo que hicimos en lugares apartados en el coche aquel verano se llamaba “doging”.

Pasábamos los veranos en la Costa Brava en un pequeño apartamento con los padres de mi mujer, después de cenar en algún restaurante siempre nos íbamos con ellos a ver los espectáculos que entre varios bares y restaurantes montaban en una especie de

plaza interior en Ampuriabrava donde no cabía un alfiler.

Tras el espectáculo de esa noche, cuando ya no había...

Me gusta verla follar

Volvemos de las vacaciones y Paco viene con ganas de follarse a mi mujer.... (Este relato es reenviado)

Fueron pasando los meses y continuamos con nuestros juegos, mi mujer disponía ahora de un segundo compañero y yo lo consentía y me gustaba, mejor dicho estaba encantado; en aquella época viajaba bastante y más de una vez cuando por la noche llamaba por teléfono a casa era Paco el que contestaba primero o simplemente no estaban a pesar de que yo acostumbraba a llamar bastante tarde.

**Otras veces se iban solos y no aparecían hasta las tantas, yo no solía preguntar donde habían estado, me conformab...

El placer de ser cornudo consentido (2 Cont.)

Han pasado dos semanas, esto ya es un vicio para mi, quiero verla otra vez y mi mujer a el mucho mas.

Pasaron dos semanas desde la última vez que nuestro amigo había estado en casa, la semana anterior mi mujer no había conseguido localizarle a pesar de haberle llamado varias veces y se la notaba inquieta, yo en cambio conseguia disimularlo, al no encontrarlo habíamos pasado ese fin de semana con los amiguetes de siempre en un pub de Madrid y pensábamos volver a quedar con ellos porque Paco siguó desaparecido durante la semana siguiente.

El viernes después de comer sonó el teléfono, lo cogí yo, era...

El placer de ser cornudo consentido

Cuando mi mujer me hizo cornudo

Cada vez que veo follar a mi mujer con otro tío me da un subidón de adrenalina, no lo puedo evitar. Me gusta ver como otro hombre la hace suya; como la abraza y la come la boca, la mete mano por debajo de la falda, como mi mujer se abre de piernas para que su macho la toque por donde él quiera y le baje las bragas hasta las rodillas, para que ella misme termine de quitarselas, cuando ella agacha la cabeza para chuparle, cuando se masturban mutuamente, cuando terminan disfrutando los dos o los tres, si es qu...

Mi mujer y yo

A mi mujer siempre le han gustado los desconocidos, incluso cuando eramos novios, aunque ya había tenido amantes esto es lo que pasó cuando aparecí con un desconocido. Fue en Madrid en el barrio de la Elipa en 1992 en la calle San....(naturalmente la imaginación se mezcla con la realidad)

Un día llegue a casa con un tío que había conocido en Algecíras, Juan se llamaba, era el director de una sucursal de una empresa importante a nivel nacional y lo acaban de despedir, debía presentarse en Madrid para recibir el finiquito y todo eso, andaba por los 30 y como yo tenia también que volver hicimos el viaje juntos en el tren nocturno.

Aunque no lo parecía el tío resulto un ligón de aquí te espero. En fin el típico feo que las mata callando y que todas las tías se quitan las bragas a la primer...