Cap. XIII: Agradecido
Ray ¿alguna vez has sido el sumiso? Mete mi pene en su boca dándome una chupada descomunal. Ver sus labios subir y bajar alrededor de mi erección tan violentamente, provoca un corrientazo hasta la punta de mi cabeza. ¡Ya para niño! Tienes razón... Ray, en serio quiero hacértelo...
En este momento me encuentro en mi pequeña Grecia; una construcción con estilo minimalista a orillas de la playa. Sería genial poder esfumarme en la Grecia real, pero ya que no puedo hacer un viaje internacional cada vez que me estreso, decidí adquirir este sitio con playa privada y simular que estoy allá ¡Genial cierto!
¡Amo desaparecer a solas en este lugar!
Sin embargo, hoy no estoy solo. Ese chico con preciosos ojos verdes, parado allí frente a una de mis obras favoritas, temblando cual cac...