El pueblo y el tío

Mi amiga me invita a pasar un fin de semana a su pueblo, con la buena suerte que también conozco a su tío.

Había terminado los exámenes, y mi amiga me había invitado a pasar el fin de semana a su pueblo. Como eran las fiestas de la comunidad nos tocaba trabajar de camareras sirviendo cubatas, y aunque no cobrábamos mucho teníamos todo el alcohol que deseáramos a nuestra disposición.

Como el pueblo estaba lejos y ninguna de las dos tenía carnet de conducir nos llevó su tío, que también aprovecharía para pasar el fin de semana. El tío de Lucía, mi amiga, era un hombre mayor, de unos cuarenta y tantos años, a...

Ella (2)

La hija de mis padres ha crecido, y ya no me pued contener cuando la tengo cerca.

Ella (2)

Sara me esperaba en la cocina con una sonrisa en los labios. Se había puesto una camiseta mía que le llegaba por las rodillas, haciéndola parecer una niña inocente. Esta imagen se transformaba al observar la redondez de sus firmes pechos de adolescente, y su culito respingón. Siempre me he considerado un hombre de tetas, pero es que era ver esa obra de la naturaleza y se me iban los ojos.

Ni que decir tiene que ya estaba medio empalmado. Otra vez. Después de haberme corrido en su boq...

Ella

La pequeña hija de mis amigos ha crecido, y no puedo contenerme cada vez que la tengo cerca.

Me llamo Mateo y vivo en Madrid. Me gano la vida en una empresa, en un trabajo gris y soso, que aunque no me inspira en absoluto me da el dinero suficiente para vivir con cierto desahogo.

Tengo 42 años, y si bien estuve casado, lo cierto es que ahora mismo vivo solo, en un pisito de divorciado. No me considero especialmente atractivo, soy demasiado grande para los cánones de belleza habituales, y con mis parejas siempre he intentado ser cuidadoso para no hacerles daño sin querer con mis manazas o mi e...