En manos de mis primos y sobrinos
Por un ajuste de cuentas, mi familia se venga de mí
Quedé huérfana de madre de niña y nos unimos mucho a la familia de mi padre. Su hermano Damián, mi tía y mis primos, Raúl y Alberto pasaron a ser mis segundos padres y hermanos. Comíamos juntas las dos familias domingos, navidades, cumpleaños, etc.
Mi tío era un hombre emprendedor, con múltiples negocios, dentro y fuera del país. Mi padre, diez años mayor que él, terminó trabajando para mi tío hasta su jubilación, que a pesar de las súplicas de Damián para que prolongase su vida laboral.
A mis s...