Camarero
Solo lee y deja volar tu imaginación
Los días pasaban igual de aburridos y monótonos que siempre, detrás de esa barra de bar sirviendo copas a borrachos, soy un camarero al cuál nadie recuerda cuando se marchaba, nunca he entendido porque llevo tanto tiempo trabajando aquí. Hoy es una de esas noches aburridas y pesadas en las que no avanzaba el reloj, pero de repente entró ella, una chica de unos 30 años morena de pelo largo hasta la cintura y rizado, sus ojos son de un color miel clarito, su piel pálida, piernas finas e inacabables, lleva un...