Las mujeres del Duque de Berg

Dejó las manos quietas. No quería defraudar a su confesor que tan buenos consejos le daba. Se revolvió en la cama, tomo un almohadón y lo colocó entre las piernas. Lo apretó contra sí intentando calmar el ardor, pero cuanto más apretaba, más ardor sentía.

LAS MUJERES DEL DUQUE DE BERG

Cuando el Duque de Berg decidió, por fin, que ya era tiempo de tomar esposa, escribió una carta a la Varonesa de Pfaf:

"... Compartí con su difunto marido, en la paz y el la guerra, vivencias que nos marcaron para siempre, lloré su muerte como la de un hermano y, seré sincero con usted, tentado estuve de pedir su mano al quedarse viuda, el dolor la hace aún más hermosa.... Ahora creo, sin embargo, que su virtuosa hija, hija también de mi amigo adorado, ya e...

Gracias por el té

No tenía nada que perder. Una simple camiseta escotada sin nada debajo y una jarra de té helado serían mis aliados. Llamé. Mis pezones casi se salían de la camiseta.

GRACIAS POR EL TÉ

Me desperté de la siesta estirándome perezosa. Había tenido un sueño erótico muy placentero. Durante unos segundos me dediqué a recordarlo. Estaba en una fiesta de cumpleaños y yo era el regalo. Me excitaba no saber a quién iba a ser regalada. Pronto lo supe. Una bella mujer madura me estaba esperando. Noté un calor intenso en mi clítoris y percibí claramente cómo aumentaba de tamaño. Lo palpé. ¡Ah, era enorme! La bella mujer me enseñó el suyo. ¡Aún más grande que el mío!. Desp...

Valjeska: caliente y obediente

Ama, me estoy excitando mucho. Se pellizcaba los pezones y se revolvía en el sillón. “Cállate, puerca.” Me senté a su lado y le quité la peluca. Le besé la boca profundamente. Me cogió la mano para ponerla entre sus piernas, pero no la dejé. Yo mandaba. Ella lo sabía.

Valjeska: caliente y obediente

Habíamos estado cenando con unos amigos. La comida, magnífica. El restaurante, precioso. La música, muy agradable. Y ella más bella que nunca. Elegante, sofisticada. La blusa de seda de Armani que llevaba puesta dejaba transparentar sus pezones. Era imposible no mirar esos senos erguidos, espectaculares en su plenitud. Ella sabía que atraía todas las miradas. De los hombres, de las mujeres. Pero cuanto más la miraban, cuanto más los atraía, menos interés sentía...

lidia30&mami40

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Teléfono muy caliente

-¿has bebido en la comida? -unas cuantas copas de vino... -entonces estarás caliente -muy caliente, pero no me avergüences. -No quiero avergonzarte, quiero calentarte más.

-Cariño ¿cómo estás?.

-Bien, me has despertado, qué mala eres.

-Aquí son las tres de la tarde.

-Y ahora qué hago despierta ¿eh? dime.

-Ayudarme a dormir la siesta.

-Ah, me despiertas para que te ayude a dormir...

-ya sabes que si no no puedo...

-¿ya te has metido dentro de la cama?

-si. Te echo mucho de menos.

-¿has bebido en la comida?

-unas cuantas copas de vino...

-entonces estarás caliente

-muy caliente, pero no me avergüences.

...

Corrida con Pablo M.

Cuando enciendo la radio, a veces me enciendo yo.

Llego a casa. Seis y media de la mañana. Ha sido una noche brutal. Dos shows, tres pases cada uno; y para rematar, una despedida de soltero, con el estúpido de Charly. No sé cómo me he dejado liar. Me he sacado un extra dejándoles tocarme los pechos, cada toque, billete en la tanga. Que se joda Charly. No había gays. Todos unos pijos. Uno me ha pellizcado un pezón, me ha hecho un poco de daño, pero con la otra mano me ponía un billete de cien euros entre las piernas. Las he abierto lo necesario para q...

Ese lésbico objeto de deseo

Sentada, frente a mi ordenador, imagino...

Ese lésbico objeto de deseo

Estoy sentada frente al ordenador leyendo relatos calientes y poniéndome muy cachonda. Pienso en los miles de usuarios que están haciendo lo mismo que yo. De entre ellos, busco al objeto de mi fantasía. Una mujer, desde luego; joven, pero no inexperta; carnosa y carnal, tímida y caliente.

Pienso en ella como un objeto sexual, sólo quiero que haga lo que yo deseo, y que goce y pida más. Y por querer quiero que sus pechos sean grandes y firmes, y que sus pezone...