Educando a la sumisa I

Pequeño relato sobre un necesario castigo por parte de una Ama a su sumisa tras no cumplir las normas establecidas.

  • Arrodíllate – dijo sin mirarme, con una voz tan firme y seria que me erizó la piel.

Sabía que lo había hecho mal, y ahora tendría que pagar por ello.

A mi Ama no le gustaba llegar a casa después del trabajo y no encontrarme esperándola. Había estado visitando a unos amigos que acababan de mudarse a la ciudad y entre charlas y risas se me había pasado la hora.

Conduje lo más rápido que pude, sabiendo que cada minuto lo empeoraría. Pero al atravesar la puerta del salón, ahí estaba, con la...