Esperandote, mi amo
Mi deseo de servirte es el mismo de siempre, mis ansias por seguir aprendiendo a ser la mejor sumisa para ti no han menguado un apice y mi cuerpo y mi mente anhelan tus mandatos. Todas mis terminaciones nerviosas esperan alertas ese subidon de adrenalina que traen consigo tus palabras.
Son las 11 de la noche de un dia cualquiera. Estoy en la cama, desnuda, como siempre me ordenas dormir. Mi cabeza apoyada en el cabecero de la cama, mis piernas flexionadas y encima de ellas y de mi estomago el portatil. Intento ver algo en el: una pelicula, una receta de cocina... lo que sea que me evite pensar en ti y en el tiempo que hace que no tengo noticias tuyas. 3 semanas ya sin hablar contigo, sin recibir una orden tuya, sin nada que venga de ti. Me digo a mi misma que no pasa nada, que no me impor...