Una ducha surfera
Sigue la pasión con Vero
Terminamos de desayunar. Vero se quedó sentada en la cama leyendo los mensajes de su móvil. Mientras yo llevé la bandeja a la cocina. Metí los cacharros en el lavavajillas y ordené un poco la cocina. Era la primera vez que lo hacía totalmente desnudo y era una sensación placentera. Moverte desnudo con total libertad por la casa, dándote igual que cualquiera te viera por la ventana con la polla al aire.
Volví al dormitorio y Vero no estaba. Debía haber entrado en el baño. La habitación olía sexo, sudor...