Pisa el acelerador (06)
El casi cuarenton le da la vuelta a la tortilla dominando y humillando al diecisieteañero, para que este se desquite haciendole beber su semen.
Llegué al bar y sólo había un matrimonio tomando café. Debían ser amigos del dueño por que les daba conversación. Pedí un cubata y hojeé el periódico. Ese bar tan triste en muchos aspectos tenía sus ventajas. Siempre tenía cuatro periódicos dos nacionales y dos deportivos. Yo durante la mañana no tenía tiempo a leer, por eso me gustaba ir después de comer.
Aunque hacía unos días que no iba por los diarios sino por ver que nuevas perrerías me haría K. El matrimonio se marchó y me quedé sólo. El día a...