Miércoles

Manuel era un señor fuerte de 1.73 c.m, marcado, pelo castaño, ensortijado, cuando me levantaba lo hacía con mucha facilidad, cuando lo acariciaba podía sentir la dureza de su cuerpo, en un tiempo trabajo en la central de abastos de estibador, hasta que le llego una propuesta diferente

Preludio:

Iba caminando rumbo a la casa, cuando en la puerta tocando el timbre encontré a una compañera del salón, la cual mi profesora asesora le había encomendado la tarea de averiguar por qué había faltado tanto, pues  ya con lo del viernes, lunes y martes eran  tres días, le dije que había estado enfermo, pero no fue creíble por que venía con mi uniforme húmedo, pero igual no le importó solo me dijo que no faltara más y se fue.

Abrí la puerta de la casa, entre y deje mi mochila, tome un libr...

Martes

Después de salir de la casa Manuel, caminando hacia la mía, mi mente aún se encontraba confundida con lo que paso, lo único seguro que quería era que se repitiera...

Preludio:

Después de salir de la casa Manuel, caminando hacia la mía, mi mente aún se encontraba confundida con lo que paso, lo único seguro que quería era que se repitiera y por un momento desee regresarme, para saber que seguía. A esa edad y en ese tiempo no había información tan extensa como hoy, pero aunque la hubiera no deseaba saber, sino sentir, pensando esas tonterías llegue a mi casa.

Al quitarme el uniforme me di cuenta de la primera consecuencia de lo que experimente, esta se refl...

Lunes

Cuando pasamos de niños a adolescentes nos suceden tantas cosas en el camino hasta convertirnos en adultos, no todas se pueden contar, en mi caso necesite un diario que acabo de encontrar en el desvan, afortunadamente lo encontre yo, y no encontre mejor sitio que este para comentarlo.

Lunes

En 1988, Mis dos mejores amigos ya habían salido de la secundaria, cursaba el 2do año y su ausencia la resentía porque aunque eran mayores que yo me llevaba muy bien con ellos. Pues cuando salíamos de la secundaria me esperaban y nos íbamos caminando platicando de todo rumbo a la casa. Y al graduarse ellos me quede solo, ya que ningún compañero de mi salón iba por el mismo rumbo que yo. Con el paso del tiempo me di cuenta que no platicaba con nadie de mis cosas, de lo que me pasaba, y es que...