Mi primera vez con un desconocido parte II
Mario y yo buscamos donde coger durante la parada del autobús para cenar, después de una mamada y una dedeada dentro del camión nos urgía calmar la calentura, pero no nos esperábamos lo que sucedió.
Como recordaran, la calentura, las manos expertas del desconocido, la oscuridad del autobús y los comentarios vulgares y lascivos de mi compañero de asiento fueron la combinación perfecta para tener una super calentada en pleno viaje, el cual se vio abruptamente interrumpido por una parada para cenar de 15 minutos que sonaban alentadores.
Como pudimos nos acomodamos la ropa y bajamos lo mas rápido del autobús. Ciertamente en México, las carreteras no tienen siempre lugares con gran infraestructura y e...