Apasionado fin de semana
Trabajaba en casa de Noelia, era casada, y parecia timida bajo sus ropas holgadas, pero cuando se quedó sola fue apasionada y provocativa.
Corría el mes de septiembre, estaba haciendo mis primeras armas en trabajar por mi cuenta, hacia un par de meses que había dejado mi empleo en relación de dependencia, cuando fui contratado por el marido de Noelia para hacer unos trabajos en la piscina que tenían en el jardín de la casa; había que realizar unos trabajos de restauración en la piscina y una instalación eléctrica con iluminación en ella y en el jardín.
Para ese trabajo vinieron tres personas más a trabajar junto a mi dos casi adole...