Muy viejo para mí
La pasé bien, pero aunque me cogiste bárbaro, la verdad es que sos muy viejo para mí , palabras más, palabras menos, eso fue lo que le había dicho. Y ahora me estaba pasando factura.
Por ese entonces estaba peleada no sólo con mi novio sino también con mi amante, como que me había quedado sin el pan y sin la torta, lo cual resulta fatal cuándo tenés encima unas ganas terribles de coger como yo en esos días.
Ese día en particular creo que estuve mojada toda la mañana. Al mediodía, cerca de la hora de almuerzo, no aguanté más y le mandé un mensaje a mi amante, estaba dispuesta a rogarle si era necesario: “Quiero que me cojas, porfis”. No me respondió, ni entonces ni después. No le...