La tinaja

No hace mucho tiempo, había un pobre albañil en Napolés que estaba casado con una bella mocita llamada Peronela. Y sucedió, que un apuesto mozo llamado Janelo, puso sus ojos en ella. La regalaba, la prometía hasta que un día, consiguió los favores que pretendía.

Por la mañana temprano, Janelo se apostaba escondido, esperando la salida del marido que se marchaba a trabajar. Y cuando éste salía, Janelo entraba.

Pero una mañana, estando Janelo con Peronela, se oyeron unos golpes en la puerta....

El huesped

En Barleta, habia un hombre al que llamaban Juani, que se dedicaba a llevar mercancias de una lado para otro con una yegua, comprando y vendiendo por las ferias de la comarca.

Tenía una estrecha amistad con Pedro, que con un burro a ese mismo menester se dedicaba y siempre que Pedro venía a Barleta se hospedaba en casa de Juani.

Pedro vivía en una casita en Tresanti que apenas bastaba para él, su mujer y su asno. Cuando Juani iba a Tresanti, lo alojaba en su casa y lo atendía como mejor pod...

Meter el diablo en el infierno

Quizá nunca, graciosas mujeres, hayáis oído decir: cómo se mete el diablo en el infierno, y por eso, sin apartarme de los efectos a que todo este razonamiento ha tendido, os lo quiero decir. Quizás así podréis salvar el alma y también conocer que, aun cuando Amor habita mejor en alegres palacios y moliciosas cámaras que en las cabañas de los pobres, no por eso deja de hacer sentir a veces su fuerza entre los espesos bosques, y los empinados montes, y las desnudas grutas, ya que, como se deja entender,...