Un día de calor
De como fuí a darme una ducha y me llevé una sorpresa.
Fue a mediados de mayo, hacía ya bastante calor. Tendría alrededor de unos catorce o quince años, creo que más bien catorce. Estaba en mi habitación con el ordenador intentando hacer un trabajo de música que habían mandado en el colegio, pero por culpa del calor no podía concentrarme y corría el riesgo de suspender la asignatura.
Mis padres habían salido y decidí ir a darme una ducha y continuar con el maldito trabajo. Salí de mi habitación y cogí una toalla para luego secarme. Cuando llegué has...