El cumpleaños de mi novio
Un gran cumpleaños con el que cualquiera soñaría.
Era el cumpleaños de César, mi novio, y quise darle una velada inolvidable.
Fui a buscarlo a la oficina, salimos y lo llevé a un restaurante muy elegante, nos situamos en una mesa lejana, nos sirvieron vino y terminamos rápidamente esa botella, entre charla y besos.
Tenia puesto un corpiño negro su color favorito, un diminuto hilo dental, con ligueros y medias negras, tenia puesta una falda corta.
Mientras el mesero nos tomaba la orden de la cena, bajé una de mis manos y empecé a tocarle l...