Masajes clandestinos a la abuela ( II )

Los iniciales masajes se convierten en algo más

PARTE  II.

La abuela se quedó estupefacta ante los hechos, le acababan de echar un polvo en toda regla, a sus 66 años acababa de correrse siendo penetrada, casi quince años hacía de la última vez que sucedió, y ahora, de repente,  la acababa de llevar al éxtasis, y dos veces, una con los dedos tras un masaje y la otra follándola furtivamente.

Se levantó el domingo como si tal cosa, no hizo comentario alguno al muchacho de lo acontecido, dejaría que se amparase en el hecho de creerla dormida,...