El crucero

Si eres una mujer rica, una niña bien acostumbrada a que siempre te den la razón, lee mi historia, por favor.

Son difíciles de creer algunas cosas, lo son porque humanamente tendemos a dudar siempre de que "eso" tan extraordinario nos suceda a nosotros, aun más difícil de creer es si alguien, directamente te cuenta que le sucedió a él mismo.

No lo cuento por lo fantástico ni por lo emocionante, lo hago por sacar de mi interior aquella experiencia extraña que le dio otro matiz a mi vida y que, de la noche a la mañana, hizo que me sintiese a mí misma como una desconocida...

En la actualidad llevo se...

Castigos

Sin los zapatos y apenas cubierta con la blusa, me vi obligada a pasar por delante del sofá donde estaban sentadas sus amigas.

A lo largo de mi relato usaré el nombre de Ana a pesar de no ser el mío...

Cuando yo tenía ocho años mi padre abandonó a mi madre dejándola con cuatro hijos; Dos chicos y dos niñas.

La situación obligó a mi madre a dividir la familia, y aceptó la oferta de unos parientes que vivían bastante lejos y ellos tomaron la responsabilidad de criar a mis dos hermanos varones...

Quedamos pues con mi madre mi hermana mayor y yo...

Maria, mi hermana, a los catorce años ya empezó a trabajar e...

Enfermero

Un par de minutos después, tenía frente a mí a tres chicas completamente desnudas, una alta, otra gordita y la tercera de piel muy oscura, quizá centroamericana.

Estoy nervioso, francamente molesto...

Pero la Dra Alonso ya ha dado por zanjada el asunto, ese es su sistema para no discutir y para mantener cierta disciplina entre los que somos sus subordinados.

Decir cosas como esta;

Serrano; No hay otro enfermero disponible y no hay ninguna mujer, es usted el único de servicio y yo lo necesito; Así que queda zanjada esta discusión...

Y yo, claro, opté por callarme, al fin y al cabo es mi trabajo.

Pero esta inspección...

...

Compartiendo piso

Soy una chica con poco caracter... En aquel piso nadie me quería.

Realmente me llamo Sara, podría decir otro nombre, sin embargo me ha parecido que sólo desde la sinceridad podré calmar un poco mi ¿alma? ... y desterrar para siempre un complejo de culpabilidad que me llena de vergüenza y que, inexplicablemente, en otras ocasiones, se transforma en esta excitación netamente morbosa que me produce el recuerdo de lo que voy a contar.

Y si quiero ser totalmente sincera tendría que empezar diciendo aquí lo que soy, no sólo porque los demás me vean así, sino porque s...