El tendero cincuentón
El tendero se aprovecha de un jovencito que tenia algunas dudas en el sexo.
Hace trece años, cuando contaba con tan sólo 14, ocurrió algo que marcó mi vida, y la que la cambio en gran parte el resto.
Yo como buen chaval, hacia todos los recados de mi mamá, ayudándola en todo lo que podía, ya que éramos muchos en la familia y tenía mucho trabajo. Y siempre iba a comprar a la misma tienda, donde el dependiente ya un hombre mayor cincuentón, calvo, regordete, con cara de vicioso.
Uno de los días cuando fui a comprar, él estaba en el baño y me dijo que me esperara un m...