Colega de trabajo con derecho a roce (5)

LA CENA DE EMPRESA (II) – La diversión llegó al acabar la fiesta

Caída la noche, la gente fue marchando a su casa, y ya solo quedábamos cuatro gatos. Macarena y yo, queríamos esperar a que llegara el marido de Rosa, para saludarlo.

Rosa iba arriba y abajo, bien alegre por los gin-tonics que llevaba entre cuerpo y espalda o, más bien, entre tetas y espalda.

También quedaba Inés, que al parecer se quedaría a dormir en la casa para evitar tener que conducir con el alcohol, y Borja, el auditor.

Borja era el externo que, durante unas cuantas semanas, se esta...

Colega de trabajo con derecho a roce (4)

LA CENA DE EMPRESA (I) – Nos invitan a una fiesta en casa de una compañera del trabajo.

Rosa era una compañera de departamento de Macarena muy simpática y extrovertida, con la que hacía buenas migas.

Una mujer madura, de unos cuarenta años, pero de carácter muy juvenil, que acentuaba con continuos cambios de peinado y color de pelo. De cara era bastante guapa, con unos grandes ojos de color avellana, y sabía sacarse buen partido, siempre vestida a la moda y adecuadamente maquillada.

A menudo nos echábamos unas risas a la hora del café, ya que le gustaba hacer bromas picantes y come...

Colega de trabajo con derecho a roce (3)

OTRA VISITA – Maca y Belén me preparan una sorpresa

Finalmente, Belén se incorporó a la empresa como mi asistente y su comportamiento conmigo y con el resto de personal de la empresa era muy profesional, y compensaba su falta de experiencia con muy buena actitud y rápido aprendizaje.

Pasadas unas semanas, un lunes, tomando el café con Maca, me dice, en un susurro:

–  Este sábado estuvimos de compras con Belén.

–  ¿Ah sí? – Contesté, sin entender mucho el interés de esa información – ¿Y cómo os fue?

–  Me llevó a una tienda de estas… s...

Colega de trabajo con derecho a roce (2)

BELÉN – Maca cumple su promesa, y yo acabo sacando buena tajada.

Continuación de "Colega de trabajo con derecho a roce (1)"

https://www.todorelatos.com/relato/175696/

La semana siguiente a aquel inesperado sábado de sexo en casa de Maca la llevamos con bastante normalidad. Nos veíamos esporádicamente por temas laborales y continuábamos tomando el café juntos, con la misma complicidad, pero sin comentar el tema.

También intenté no preocuparme demasiado por saber cómo le iba con su nueva compañera de piso, después de descubrir los secretos que escondía su...

Colega de trabajo con derecho a roce (1)

MACA ME ENSEÑA SU PISO – Mi compi de trabajo se ha mudado a su nuevo piso, y un día me invita a verlo y disfrutar de la piscina.

Macarena era una compañera de trabajo que había entrado a trabajar en otro departamento, con el que me tocaba interaccionar con asiduidad, y acabamos compartiendo las pausas del café.

Era una chica de treinta y pocos, con el pelo castaño y ondulado, por los hombros, y unos ojos oscuros y brillantes tras unas gafas de pasta muy modernas. Tenía un cuerpo menudo, con una cinturita estrecha, unos pechos medianos y muy bien puestos y un trasero respingón que seguramente me pilló mirando de reojo alguna que...

Cómo me convirtieron en una depravada (11/11)

EPÍLOGO – Hannah se despierta muy caliente y se siente desatada. Orgías, Interracial, Lésbico.

Después de la orgía, Clarice había llamado a un taxi para volver a casa, y el resto nos fuimos a dormir. Al día siguiente, a pesar de ser domingo, Marco debía coger un avión transoceánico, ya que el lunes tenía un congreso en Boston, y quería descansar.

A la mañana siguiente, la luz del sol filtrándose por la ventana me hizo despertar perezosamente, remoloneando. Me sentía muy relajada, y el contacto de las sábanas con mi piel desnuda activaba mis zonas erógenas, haciendo que me sintiera placenteramen...

Cómo me convirtieron en una depravada (10/11)

CENA CON SORPRESAS – Estalla la depravación de toda la familia. Orgías, Filial, Transexuales.

Había dejado de ser esa mujer recatada de hacía semanas, y estaba descubriendo los nuevos límites de mi sexualidad. Durante la estancia de mi cuñada en casa, habíamos tenido varias conversaciones “de chicas” y, en varias ocasiones, Mónica me había dejado entrever que Marco tenía una faceta desconocida para mí, y que podía potenciar mi nueva y liberada sexualidad.

Un día me decidí a apostar fuerte y, de forma espontánea, le comenté sobre la asistenta que hacía semanas que había contratado, contándole s...

Cómo me convirtieron en una depravada (9/11)

LOS PREPARATIVOS – Narrado por Érica. Los hermanos traman algo. Filial, Sexo Anal.

Pasada una semana, mi tía Mónica volvió a Milán. Su paso por nuestra casa había provocado un descalabro en nuestras relaciones familiares, especialmente entre mi hermano y yo.

Si bien mi relación con Simón siempre había sido muy estrecha, la influencia de la hermana de mi padre había sido el detonante de una relación que estaba sacando mi lado más perverso. Siempre me habían atraído más las chicas que los chicos, pero me sentía totalmente seducida por mi hermano o, más exactamente, por sus inacabables...

Cómo me convirtieron en una depravada (8/11)

CLARICE SACA MI LADO MÁS PERVERTIDO – Hannah ya está totalmente desatada. Transexuales, Orgías, Interracial.

La verdad es que la hermana de mi marido me sorprendió, y muy gratamente.

Me di cuenta en seguida de que ambos hermanos mantenían una relación muy estrecha, y desde el primer minuto Mónica se mostró muy cercana conmigo.

Así pues, la semana transcurrió animadamente, y cuando el trabajo me lo permitía, acompañaba a mi cuñada a hacer turismo o de compras.

Marco andaba inusualmente… “acelerado”, pero era importante que dejara reposar los piercings que me había puesto el fin de semana anterior,...

Cómo me convirtieron en una depravada (7/11)

LLEGA TÍA MÓNICA – Narrado por Érica. Seguimos explorando el entorno familiar, de la mano de Érica. Con la llegada de tía Mónica, descubrimos secretos cada vez más prohibidos. Filial, Voyerismo, Lésbico, Tríos.

Mi madre me había pedido que fuera a buscar a mi tía Mónica al aeropuerto, ya que llegaba de Milán esa tarde. Le pedí a mi hermano Simón que me acompañara, ya que yo me había sacado el carné de conducir recientemente, y todavía no tenía mucha confianza.

Al llegar al aeropuerto, aparcamos el coche en la terminal y fuimos a la zona de llegadas. El vuelo era puntual, y mi tía no tardaría mucho en salir.

Al cabo de unos minutos, la vimos aparecer por la puerta. Hacía mucho tiempo que no la veíamos a...