Los pies de mis alumnas y los de mi profe...

Con mis chicas por testigos, un hermosa historia de amor con los pies de mi profe.

Ayer me junté de nuevo con mis angelitos de pies bonitos.

Pero vinieron a estudiar. También hay que disimular un poco, caramba.

Si las familias de ellas se enteran, nos disuelven la sociedad, por así decirlo.

De todas maneras, se descalzaron apenas llegaron y se sentaron alrededor de la mesa muy seriecitas, y estuvimos más de una hora con explicaciones y ecuaciones y demás.

Todas me dan un besito estilo piquito cuando llegan a casa, pero Ruth saca una puntita de lengüita cada ve...

Mis alumnas ahora me enseñan...

Otra sorpresita de mis alumnitas. Tetitas, almejitas y dulces pies.

Bueno, luego de una impasse de algunas semanas regresaron los piecitos juveniles a mi vida. Nada hay mejor para torturar a un joven en la flor de la edad, que cuatro pares de pies traviesos e irreverentes de estudiantes universitarias de 18 y 19 años.

Otra vez mi departamento y llegar con algo de temor por las sorpresas. Las relaciones con mis angelitos eran más que fijas. Ellas a estudiar y yo obligado a chupar deditos bajo la mesa y dulces y aterciopeladas almejitas acostado boca arriba, o sum...

Más pies aristocráticos, bañados en leche y orín

María Clara, la del relato de las mujeres de sociedad, quiere chupada de pies, pero tabién sentir el calor de una meada.

Acá estoy de nuevo, con los testículos hinchados de necesidad, de desesperación, de locura por los dedos de los pies de una mujer que me desmaye de placer con sus bellos atributos. Y tenía fijo en mis retinas unos dedos fuertes, de uñas grandes y pintadas de color rojo sangre. Tenía una sensación en el miembro de esos dedos retorciéndolo, acariciándolo, sobándolo con sublime pasión y maravillosa inexperiencia.

Quería sentir en mi boca el sabor salado pero delicioso de unos pies de mujer madura,...

Pies de mujeres maduras

Conociendo mis habilidades para chupar deditos de pies, me contrataron para hacer podología bucal. Todas quedaron satisfechas, pero la aristocrática María Clara quiso más.

Continuando con la saga de mi vida y lo más lindo del mundo, los deditos de los pies de las chicas, les voy a contar una historia a la que me llevó a protagonizar Sandrita, la muchachade los más hermosos pies al natural que me han tocado y dado placer.

Un día, Gina me llama por teléfono y me dice:

  • Mi chupadeditos, Sandra me manda a preguntar si querés ganar dinero fácil y de paso disfrutar de pies bien cuidados.

Le pregunté de que se trataba, y me dijo que había cuatro mujeres entre...

Los pies de Sandra

Sandra fue la más expresiva con sus pies en mi fiesta de cumpleaños. Tan es así que me hice otro regalito. Un capullito rosa de diez deditos.

La verdad, la fiesta de cumpleaños del otro día me dejó enloquecido. Estaba tan caliente por pies de mujer, por deditos de pies de mujer que no se me bajaba más que por momentos. Sentía una carga sexual enorme en los testículos, y mucho más en mi parte más sensible, que es en donde más me gusta el contacto de los deditos de los pies de las chicas, la cabeza del glande.

Además. me quedé recaliente con Sandrita, la profesional de 22 años, la de los pies de sabor delicioso, de uñas sin pintar y de d...

Pies Profesionales

En mi cumpleaños, mi amiga Gina, profesional del sexo, me dio un regalo inolvidable con sus pies, junto a sus amigas.

Llegué al edificio harto conocido. Toqué el timbre del departamento donde iba por los pies más dóciles, hábiles y profesionales que alguna vez me habían cogido. Los de mi amiga Gina.

Era mi cumpleaños, y pensaba regalarme con los pies, bonitos, tentadores, siempre dispuestos de mi propia profesional del sexo. Así es le como gusta que la llamen. No soy puta, prostituta ni ramera, dice. Soy una profesional del sexo, mi tarea es darle placer a los hombres como me lo pidan, para eso estudio, practic...

La vendedora de calzado

Una vendedora de calzado descubre que sus pies no sólo sirven sirven para caminar.

Entré a la tienda de calzados. Me gusta esa tienda, tiene un salón inmenso, y las dependientes son tiodas mujeres jóvenes, de entre 20 y 30 años. Es verano, o sea que por copmodidad, todas calzado abierto con los preciosos deditos al aire. Una morocha me llama la atención. Piel café con leche, estattura media, pelo negro atado en un moño tras la nuca, bluesa azul pantalones azules con un puño elástico a media pantorrilla. Todo para qué, para que sus pies se destaquen como monumentos a al deseo fetich...

Orgía de pies juveniles

Mis alumnas descubren que me gustan los pies femeninos. Aprenden muy ràpido.

Tengo 26 años, y para ayudarme un poco en los estudios preparo alumnos, especialmente chicas, para ingreso a la universidad.

Hay un grupo que conocí este año, son cuatro, muy descaradas, ruidosas y bastante buenas. Lindas tetas, lindos culos, lindos pies. Pies de chicas de dieciocho, suaves, aterciopelados, muy movedizos y tentadores. Hay una quinta, callada, parece tímida, pero es un poco arrogante. Es una belleza, se sabe linda, pies de ensueño, tiene dinero.

Vivo solo, así que a veces, c...

Malentendido

...y yo pensé que era una manera de decir...

Me lo habían avisado, mucho no entendí, o no quise hacerlo, si cogía como nunca había visto a mujer alguna hacerlo, sólo le importaba mi placer, me hizo delirar de gozo como mujer alguna lo había hecho jamás.

Además, el mensaje era un tanto ambiguo y poco realista para una relación adulta aunque transitoria, circunstancial, diría.

Me habían avisado, son las dos primeras veces, después...

Las dos primeras veces fueron inolvidables, era una máquina de placer que sabía dónde, cuándo, cuán...

Los pies de mi vecina

Una mujer, muy educada y femenina. No sabe que es la dueña de los más lindos y deseados pies de la vecindad.

Miriam. Unos 42 años, ama de casa y maquillista, un metro sesenta, cintura adolescente, pechos pequeños pero no tanto, deseables todavía, se adivinan suaves. Caderas que se hamacan al caminar y llaman a mirarlas. Muslos apenas rellenitos por la edad; glúteos suaves, rellenitos, lo justo, todavía paraditos y redondeados. Está acorde con su edad, pero cuidada. Se mantiene, camina mucho por las tardes. Pelo color cobre. Seguramente algunas canas. Perfectamente maquillada siempre, apenas esbozado de entre...