Secreto Eterno

Me he enamorado de usted. Pero usted no puede contestar a mis cartas. Pues usted no existe. Es usted sólo una imagen. Cada noche con un rostro distinto, una historia diferente.

Secreto Eterno

Clamando a la providencia por mesura, suspiré azorado ante la plenitud de su belleza. Beldad magnificada por la sutil armonía de las castañas sombras de un tenue maquillaje, aplicado con el mayor cuidado sobre el leve destello de su dispersa mirada. Misteriosas farolas de dorada languidez encontraste a la dulce faceta del pálido rostro, apenas teñido por el claro rubor de la mórbida infamia.

-¡Maldito de mí!-exclamé- .Mil veces he jurado corregirme y mil veces he faltado...