Crimen y castigo de un esclavo 2
Or orden de mi Dueño, Amo y Señor y siguiendo Sus instrucciones, me veo obligado a continuar describiendo las justas penalidades a las que este indigno esclavo es sometido.
Por orden de mi Dueño, Amo y Señor doy las gracias más profundas a todos aquellos que me han transmitido a su través su desprecio, diatribas y correcciones por mi deficiente forma de relatar los hechos y la carencia de interés hacia lo que a mi insignificante persona pueda acontecer. A pesar de ello, y siguiendo Sus instrucciones, me veo obligado a continuar describiendo las justas penalidades a las que este indigno esclavo es sometido.
Cuando las luces del cuarto se volvieron a encender yo estaba a...