Si por mi fuese...

Nada difícil describir tu piel...

Si por mi fuese, te dibujaría con mis dedos.

Trazaría cada línea con mis dedos, cada curva con las palmas de mis manos.

Como si fuese difícil hacerlo.

He trazado tus líneas directamente en tu piel durante años.

Sería tan fácil hacerlo hasta con los ojos cerrados, sin mirarte, sólo imaginándote, sólo siguiendo los trazos ya existentes, grabados en mis ojos.

Si por mi fuese, te dibujaría en mis sueños para soñarte, para tener tu imagen ahí presente.

Pero es que ya está...

Soledad

Lo que siento al saber que ya no estas.

A veces pienso en lo irracional que es todo lo que me rodea, desde mis pensamientos más simples, hasta los sueños más añejos almacenados en mi mente.

Si, tonteras mías, pero ¿qué puedo decirte?.

Un día simplemente me levanto asexual, sin sentir ganas, deseos, sin saber si soy hombre o mujer. Hay días en los que despierto y deseo con ansias animales que me hagas sentir los orgasmos más fuertes y prolongados que puedan haber.

¿De qué se trata todo esto?

No lo sé, evidentemente la...

Te deseo

Reflejo del sentimiento de exitación mientras pienso en él...

Hoy mi cuerpo siente tu ausencia, como añoro tus caricias, tus besos.

Con los ojos cerrados, veo tus ojos recorriendo mi cuerpo.

Deseo sentirte, necesito sentirte de nuevo.

Tus fuertes manos acariciando las puntas de mis pechos, que siempre añoraban alimentar tu sed de deseo... Tus labios acariciando los finos pliegues de mi vientre y dibujando todos los caminos posibles al centro de tu mayor placer... Tu piel caliente rozándola mía, calentándola más y más...

Sentir como penetras...

A la luz de las Velas

De cómo una mujer ve extinguirse el último halo de vida de su amado.

A la luz de las velas

Me encontré sentada una vez mas frente a la luz de las velas, en la misma mesa de siempre, en nuestro lugar preferido. Solíamos venir a comer al menos dos veces a la semana, pasábamos horas interminables conversando, compartiendo nuestras opiniones profesionales, e incluso discutiendo, frente a este mismo candelabro, frente a esta luz que hoy veo atentamente y que me recuerda a ti.

Pedí al mesero el trago de siempre, un ruso negro, doble, con mucho hielo picado y...

Zapatos Rojos (II)

No te quedes inmóvil al borde del camino / no congeles el júbilo / no quieras con desgana / no te salves ahora ni nunca. / No te salves / no te llenes de calma / no reserves del mundo / sólo un rincón tranquilo / no dejes caer lo párpados / pesados como juicios / no te quedes sin labios / no te duermas sin sueño / no te pienses sin sangre / no te juzgues sin tiempo. / Mario Benedetti. No te salves. (Estracto).

Zapatos Rojos

Capítulo II

-¡Señorita! –

De inmediato desperté de mi sueño profundo. Aún me hallaba en el patio, junto a la banca, de dónde no me había movido. No habían transcurrido mas de 10 minutos desde que me había parado allí. Me sentía aturdida. Estaba despertando de un sueño, que me había parecido tan real.

-¡Señorita!, ¿está Usted bien?, ¿puedo ayudarla en algo? -.

Voltee despacio y miré sus ojos. Mientras lo miraba aún intentaba despertar de mi ensueño. Me sentí ma...

Zapatos Rojos (I)

La recuerdo en sus dilemas entre cuentas y poemas. En el ruido de la calle perdida siempre en los detalles. La recuerdo, sin vergüenza. La recuerdo en un segundo en que llego a lo mas profundo. Y dejo en mi corazón, la marca de su amor en solo un segundo. (Bacilos).

Zapatos Rojos

Capítulo I

Iba de tienda en tienda esa mañana, buscaba sin cesar ese par de zapatos rojos de raso, con tacón de aguja, perfectos para combinarlos con aquel vestido que me obsequió Mariano. Esa noche sería especial, así que lucir perfecta era mi misión.

Caminando por el callejón Barroco, encontré una zapatería que exhibía en su pequeña vitrina justo los zapatos que había estado buscando. La tienda aunque pequeña, poseía una mercadería exquisita. Me quedé embrujada en la ...