RUPTURA. Desenlace
De como acabó aquella extraña noche
Poco a poco empezaba a ser poseida por aquellos dos viejos verdes,mis tetas estaban ya a su merced, y mi mente empezaba a comprender que ya no había vuelta atrás. Mi mirada bajaba timidamente y mi caida de ojos parecia avivar más todavía a los dos hombres que poco a poco se adueñaban de mi cuerpo,con cierto disimulo comencé a ver crecer ambas pollas hasta el máximo esplendor que podían dar. Cada instante se acercaban mas a mi rozando sus miembros contra mis medias, sentia su dureza buscando mis piernas, no...