Sabor a tí

Algo que no encaja aquí pero sí encaja conmigo.

Sabor a tí


Hacía mucho tiempo que mi corazón no latía tan aprisa,

hacía mucho que no podía ver en la noche ese color

rosáceo que nos deja el Sol cuando se esconde.

Había olvidado ese gracioso cosquilleo que recorre la

piel cuando sientes, o imaginas, una piel de mujer que

se te antoja confortable, que le queda como un guante

a tu propia piel.

Y ese sabor a melaza de caña que pude sentir al

saborear tus labios, y esas ganas de vivir que m...

Tu piel

Sexo a la antigua usanza.

Parecía que no llegabas nunca. El sueño me vencia y mi impaciencia por verte aparecer me hacía pensar que te olvidaste de mí. Más, de pronto entraste por la puerta de la habitación. Yo estaba acostado con el torso desnudo y con un pantalón de pijama de algodón. Tú llevabas un camison muy cortito de seda que mostraba por completo tus muslos, dejando transparentar tus pequeñas braguitas negras y tus senos. Te acercaste a mí con una sonrisa y una mirada, mezcla de amor y deseo, acariciaste mi pecho, y...

Mi deseo

Un pequeño juego amoroso en la habitación, no muy pornográfico.

Estabas arropada y acostada de lado en la cama.Yo entré en la habitación, me agache y te regalé una sonrisa.Después, acaricié con suavidad tu rostro y te besé en los labios.

Te habias puesto para dormir una camiseta de algodón y unas braguitas blancas de encaje.

Me senté en una silla que habia frente a tí y me quité los zapatos, luego los calcetines. Después me puse de pie para quitarme despacio el pantalón.La camiseta me tapaba justo por depajo de las caderas, así que introduje mis manos...