Un vuelo largo
En un vuelo transoceánico, un pasajero se ve "atrapado" por el encanto de una bella azafata.
Después de una larga temporada de trabajo en la sucursal argentina de mi empresa tocaba volver a Madrid. Aunque el vuelo es largo, más de 9 horas, estaba tan cansado que no me importaba nada meterme tanto tiempo en el avión. En primera clase de una aeronave tan grande como un Airbus 340, las butacas son grandes y con una buena manta y una almohada te puedes echar un buen sueño. Ya dentro del avión y tras despegar me fijé en ella. Algo más joven que las demás azafatas, pero no mucho, sobresalía de las demás...