La proveedora y el ascensor

Llegué a la puerta del edificio justo cuando llegaba ella, una mujer espléndida. 1,75, delgada, melena rubia recogida en una cola, ojos verdes muy penetrantes y un cuerpo de escándalo que se intuía debajo de aquel traje negro tan serio.

LA PROVEEDORA Y EL ASCENSOR

Era un día cualquiera, estaba llegando al edificio donde se encontraban mi oficina, andaba mecánicamente, mientras estaba absorto en los problemas pendientes de solucionar y para colmo tenía una visita.

Era una posible proveedora para la empresa, tenía fama de dura y muy seria, no iba a ser fácil sacarle un buen precio. Me había vestido con el traje más elegante que tenía, camisa con un ligero tono sonrosado y corbata ocre, la de la suerte. Mi secretaría solía so...