Mi Sara - 2. Su boca
Su carnosa y roja boca. Mía, como cada rincón de su cuerpo y su espíritu. Continúa mi primera noche con Sara y su marido.
Después de once años de matrimonio, él quería verla con otro hombre. Contactaron conmigo por internet, nos conocimos los tres en una cafetería, ella dio su tímida aprobación y una semana después llegué a su casa para satisfacer aquellos deseos. A él le bastó desnudar a su imponente mujer frente a mí y verla postrada a mis pies para correrse, no pudo aguantar más. Sara creyó entonces que la noche había acabado, pero no había hecho más que empezar.
El marido -ni siquiera recuerdo ya su nombre- quedó tir...