Soy una mujer y pago por sexo
Sus noches como observadora cobrarán un protagonismo inesperado.
Yo pago por sexo.
Pero no es lo que todos están pensando. Pago sólo para ver.
Lo único que voy a decir de mí es que tengo treinta y un años, el dinero para mí no es un problema y tengo un deseo contenido de sexo que me está volviendo loca.
Hace tres meses que encontré esta especie de solución a mi situación aunque no sé por cuánto tiempo más sea efectiva.
Todos los viernes a las ocho y treinta de la noche me subo a mi auto desde la oficina y me dirijo hasta este lugar donde por una c...