Luisa (IV)

La adolescencia como el momento y lugar donde dirigirse en busca del origen de todo el morbo.

Había estado en Cadiz con mis padres, siempre veraneábamos allí, y el hecho de que un par de semanas antes hubiera mantenido aquella charla con Luisa hizo que no viera Cádiz, sus playas y sus mujeres de la misma manera. Como todo en mi vida. Cumplí los catorce, y casi todos los días entre las palabras de Luisa, sus bragas con su coño intuido y el escote, hizo que a cada instante me refugiara en el baño y experimentara con mi polla, masturbándome e imaginando el cuerpo desnudo de ella. Miraba a las mujeres e...

Luisa (III)

La adolescencia como el momento y lugar donde dirigirse en busca del origen de todo el morbo.

No recuerdo que película vimos, pero sí que no podía dejar de mirarla. Como decía en el capítulo anterior, para un adolescente novato en lo de mirar me era muy complicado disimular, y estoy seguro que ella, o se acostumbró a que la observara o realmente  si era un superdotado del disimule.

Ella estaba a un extremo del sofá de tres plazas, yo en un sillón al otro extremo, y mientras que Luisa estaba cómodamente recostada, con los pies recogidos y la mirada absorta en la tele (creo que era un VHS de u...

Luisa (II)

La adolescencia como el momento y lugar donde dirigirse en busca del origen de todo el morbo.

Luisa. Era como si llevara toda la vida junto a nosotros. Como si formara parte de nosotros. No su marido o su hijo, de quién me esforzaba en ser amigo, sino ella.

La recordaba de muy niño tomando café en mi casa, con mi madre, mientras reían o lloraban. La recuerdo en su casa cuidándome, mientras daba de comer a su hijo la papilla. La recuerdo llevandome al colegio cuando mi madre estaba enferma, y la recuerdo recogiéndome de clases de inglés, feliz porque iba con ella. Nada raro, nada extraño en una a...

Luisa (I)

La adolescencia como el momento y lugar donde dirigirse en busca del origen de todo el morbo.

A mis trece una década terminaba dando lugar a los noventa, y con ese cambio en Europa, mi mundo pasaba de los playmobil al placer sexual con una plácida transición que originó en lo que hoy más morbo me produce y provoca.

Por aquella época existían unos lugares comunes por el que todos los adolescentes de mi época pasábamos de visita, con el objeto de producirnos ese placer tan maravilloso por novedoso y por su misma esencia. Las revistas, algunos programas de Telecinco y los catálogos de Venca eran...