Inicios
Como una noche de sexo en el coche se convierte en un polvo para recordar.
Inma y yo somos un matrimonio que acaba de entrar en los cuarenta. Nos conocimos recién cumplidos los 20, por lo que podríamos decir que llevamos media vida.
Cuando la conocí era una chica muy alegre, bajita, delgada, con unos pechos pequeños y unos pezones oscuros con areolas que casi la cubrían el pecho. Con el tiempo y algún retoque eso cambio, pero lo que os voy a contar, paso en esos primeros años.
Ese verano lo pasamos en el pueblo, cerquita de donde vivimos, pues iban a ser las fiestas y...