Peligrosa Adicción, parte I
El vampiro no buscaba nada más que un buen polvo y un aperitivo para pasar la noche, pero cuando captó el aroma de su sangre -de ese chico rubio con los ojos azul brillante y sensuales cicatrices en sus mejillas- las reglas del juego cambiaron para siempre. Sasuke/Naruto. Sexo Gay.
Peligrosa Adicción
A pesar de la cantidad de gente que abarrotaba el local, la última moda en Barcelona, su propia presencia los advertía, y como consecuencia se había formado un círculo despejado de considerable diámetro a su derredor. Solo la desdichada joven que esa noche bailaba con él, se atrevía a romperlo.
Humanos... siempre tan despreciables; la cara errónea de la moneda, el eslabón débil de la evolución. Los odiaba, no, los aborrecía —el odio sería una emoción demasiado trascendenta...