Buena chica (Parte 3)

Rosana pensaba que Ernesto ya tendría suficiente con lo que pasó la otra noche. Pero Ernesto quiere más y, aunque él no lo sepa, ella le va a dar mucho más de lo que podría haber imaginado.

Rosana escucha música en sus auriculares mientras pedalea en una de esas bicicletas del gimnasio con pantalla. Ha elegido su paseo virtual favorito. Así que imagina que va con su bicicleta por Monument Valley. Lleva unas mallas de camuflaje muy ajustadas y una camiseta de tirantes blanca y, después de media hora pedaleando, ya está sudando a chorros. Mientras ella mira la pantalla y escucha música zen un par de tipos que tiene detrás le miran el culo. Ese culo redondo y prieto. Irresistible. Ella sabe que l...

Buena chica (Parte 2)

Ernesto sigue chantajeando a Rosana. En su cabeza sus planes se van cumpliendo a la perfección. Está seguro de que Rosana le pertenece y podrá hacer con ella todo lo que quiera.

La noche que Ernesto tuvo la primera cita con su esposa ella no paró de hablar.

El escuchaba pacientemente, aparentando interés a lo que ella le iba contando. Se conocieron en una de esas webs para ligar previas al boom de Tinder. Estuvieron chateando y mandándose mensajes varias semanas hasta que decidieron conocerse.

A él le llamó la atención desde el principio su foto de perfil. Esa cara de niña buena empollona con gafas, inocente y angelical. Nunca le confesó a su mujer que cada vez que acab...

Buena chica (Parte 1)

Rosana comete un error y queda a merced de un hombre que le resulta repulsivo. ¿Hasta dónde será capaz de aguantar?

Rosana está borracha. Muy borracha.

Además, le ha dado unas cuantas caladas a un porro que se estaban fumando los becarios. Le han ofrecido y ella se ha hecho la cool, no quería quedar como la mojigata de finanzas. La marihuana siempre la ha puesto cachonda. Quizá por eso está ahora en la sala de juntas de la cuarta planta, con las bragas por los tobillos, el sujetador bajado por debajo de las tetas medio salidas del vestido, las manos apoyadas en la larga mesa de reuniones y la falda levantada por en...

Dime que me quieres.

Rebeca folla con su amante cada miércoles en un hotelucho de mala muerte. El sentimiento de culpa la persigue. Ama a su marido. ¿Por qué hace esto?

Rebeca se siente como una mierda mientras se mira al espejo. Como siempre que acaba de follar con Bilal. Recién duchada se seca el pelo como puede con el secador del hotelucho en el que están. Uno de esos hoteles para follar donde no hay recepción y subes a la habitación directo desde el aparcamiento. Un sitio discreto donde los jefes se acuestan con las secretarias y cosas así. Para traer a tu putilla. Así se siente siempre que acaban. Como una putilla barata.

Sale del baño ya vestida y se queda mira...

El Salitre

Javier y su esposa Vera se topan con un pequeño bar de un pueblo pesquero. Un lugar que seguramente no olvidarán nunca.

-       Me voy al agua. ¿Vienes?

-       Ve tú. Yo voy en un minuto.

Mi mujer se levanta y se dirige hacia el mar. Hace mucho calor, quizá demasiado para estar a mediados de Junio. Justo lo que andábamos buscando. Calor. Playa. Los dos sólos por primera vez en más de 10 años. Los niños se han quedado con los abuelos y tenemos dos largas semanas sólos ella y yo. Levantarnos a la hora que nos de la gana, comer lo que queramos, echar siestas, salir a cenar, tomar unas copas, follar todo lo que no h...