La lección de papá

Carlota se casa, vestida de blanco con su novio de toda la vida. Su padre tiene que ayudarla a vestirse para la boda

Sé que lo que hice está mal y que no lo volveré a hacer, pero hay veces en que los padres tenemos que hacer cosas que pueden no estar muy bien vistas. A lo mejor esto es solo una excusa, porque lo cierto es que desde que mi hija Carlota fue creciendo, me empecé a sentir atraído por ella de una forma inadecuada y salvaje.

Mi mujer y yo nos habíamos separado hacía ya unos cuantos años porque no nos aguantábamos. Lo mismo le pasó a mi hija y terminó mandando a paseo a su madre, mudándose a mi casa en cua...

Historias del spa (¡Relájame mucho!)

Susana llevaba mucho tiempo sin que su marido la rozara siquiera. Su nivel de estrés era desbordante y decidió visitar un spa cerca de su trabajo.

Os voy a contar algo que me pasó hace muy poco y que jamás me imaginé que me podría pasar a mí. No voy a decir que soy una mujer guapa, pero soy bastante alta, morena, de ojos grandes y negros y labios carnosos. Soy bastante curvilínea, lo que nunca me ha ido mal con los hombres, siempre y cuando les gusten las hembras de verdad, porque además necesito que me tengan bien satisfecha en cuanto a asuntos de cama se refiere. Sexualmente siempre he sido bastante activa, aunque no he tenido más que tres parejas a...

El entrenador de Momoko (III)

Momoko ha empezado a descubrir lo que un hombre puede hacerle disfrutar. Ahora su entrenador debe enseñarla como complacerle a él.

Poco tiempo pudo Momoko disfrutar del relax que sintió nada más el entrenador consiguió sacar la cabeza de entre sus piernas. El señor Tamura respiraba agitadamente y la pava de la chica pensó que sería debido al esfuerzo que había hecho y que tanto placer le había suministrado. Abrió los ojos cuando sintió que Tamura se abría camino entre sus piernas, acercándose más a ella.

  • Mira lo que me has hecho... Ahora soy yo el que necesita de ti.

Momoko le miró deseosa pero sin saber qué hacer. No ten...

El entrenador de Momoko (II)

Después de terminar el entrenamiento, Momoko disfrutó de un delicioso masaje a manos de su entrenador, el señor Tamura, quien no estaba dispuesto a dejarla marchar sin enseñarle más cosas sobre su deliciosa anatomía.

Poco a poco, el señor Tamura fue dejando de rozar las partes más sensibles del sexo de Momoko, para permitir que pudiera relajarse completamente. Eso no significaba que hubiera dejado de tocarla, sino que poco a poco las manos del dedicado entrenador, se dirigieron a los labios menores de la chica, retorciéndolos suavemente entre sus dedos índices y pulgares, acariciándolos lentamente sin pretender excitarla otra vez. Tironeó con delicadeza de los dos labios a la vez, para soltarlos y dejarlos desdoblados d...

El entrenador de Momoko (I)

El señor Tamura es el entrenador de Momoko. Ella sabe que él la desea y le encanta ponerle cachondo haciéndose la inocente, pero el entrenador no está dispuesto a esperar más para disfrutar de su cuerpo

El entrenador había citado a Momoko bastante temprano. Quería trabajar con ella sin que nadie les molestara. Nadie más entrenaba en domingo pero Momoko se aburría poderosamente en su casa y le pareció una idea excelente ir al gimnasio. Sus padres tenían una especie de ferretería y se pasaba sola prácticamente todo el tiempo que estaba en casa, que después de asistir al instituto y sus entrenamientos en el gimnasio, tampoco era mucho.

Momoko no era nada tonta y sabía que el señor Tamura la miraba de di...