Intercambio mojado
Mientras hacíamos el amor al aire libre, mi esposa se encontraba sentada en un escalón de la pileta, totalmente desnuda, con las piernas abiertas de par en par y echada hacia atrás con sus ojos en blanco, delante de un extraño que no paraba de mirarnos. Sin forzarlo y con su consentimiento, experimentamos un trío muy excitante.
INTERCAMBIO MOJADO
Esta experiencia nos ocurrió en Marzo del 2004, en la ciudad de Córdoba.
La relación con mi esposa se estaba rompiendo de a poco. De hecho, ya estábamos separados hacia dos meses. Ella se había ido a vivir con su madre que había enviudado hacia poco tiempo y yo, continuaba solo en casa.
Días antes, había recibido un mail de una pareja cordobesa, preguntando por nosotros. Ellos eran Claudia y Pablo, que aunque no los conocíamos personalmente, ya habíamos mantenido un...