Una tia, una nuera y yo
Como un descuido me llevo a una buena tarde de sexo
Domingo, tres de la tarde, después de haber venido desde otra ciudad para ayudar a unos familiares a realizar una mudanza, me sente a la mesa para comer. En un principio, iria a comer con mi suegra, pero su hermana, me dijo que ya había hablado con ella y que no le importaba que me quedara a comer allí, con ellos en forma de agradecimiento por la ayuda con la mudanza.
Ese dia comimos en el chalet de la tia de mi novia, que se llama Mari, sus dos hijos, la mujer de uno de ellos que se llama Yoli, sus d...