pipo el perrito que me enseño a gozar su lengua.

El calor atípico, contribuyo a que pipo me diera una rica mamada de sexo.

Aquella noche de primavera, mi vida estaba por cambiar por completo, mis papás asistirían a una fiesta, yo decidí quedarme en casa, al salir me recomendaron cerrar bien puertas y ventanas, era la primera vez que me quedaba a solas en casa, el calor era sofocante, subí a mi recamara y me puse una batita transparente, sin sostén, solo llevaba la panti de algodón, miraba una película de terror, por algo que no puedo explicarme, sentí miedo, decidí cambiar de canal y mirar algo más tranquilo, sin embargo estaba...